Algunos pacientes acuden a un fisioterapeuta antes de ir a la consulta de traumatología, pero es importante determinar cuándo hay que ir directamente al traumatólogo, ya que hay casos en los que el diagnóstico precoz es el factor más decisivo para un buen resultado.

El traumatólogo se encargará de realizar las pruebas diagnósticas necesarias y de poner en marcha el tratamiento más eficaz con el fin de recuperar la funcionalidad del sistema músculo-esquelético en la mayor brevedad posible.

Entre los signos de alerta para acudir a un traumatólogo se encuentran:

  • Fracturas
  • Tendinitis
  • Artrosis
  • Lumbalgia
  • Desviaciones de columna
  • Síndrome de túnel carpiano
  • Rotura de menisco