Las deformidades de la columna vertebral son curvaturas anormales de la columna vertebral que pueden estar presentes al nacer, desarrollarse en la primera infancia o aparecer durante la adolescencia.

Algunas deformidades se producen cuando la columna no se desarrolla adecuadamente durante el embarazo. Mientras que otros, como la escoliosis idiopática, no tienen una causa que se conozca.

Signos y síntomas comunes

  • Dolor de espalda
  • Altura desigual de los hombros
  • Omóplatos desiguales
  • Pelvis inclinada
  • Dificultad para caminar
  • Dificultad para respirar
  • Espalda encorvada
Miguel Angel Santana Reyna - Doctoralia.com.mx
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Cuando los signos de una deformación se vuelven más evidentes, se pueden utilizar métodos de diagnóstico como radiografías, resonancias magnéticas y tomografías para averiguar qué tan grave es la deformación. Muchas afecciones de la columna vertebral pueden compartir los mismos síntomas, por eso tenemos especial cuidado para obtener un diagnóstico correcto.

Tratamientos no quirúrgicos:

Trabajamos con el niño para crear el tratamiento adecuado para su edad, la gravedad de la deformación y la ubicación de la curvatura.

Hay opciones no quirúrgicas menos invasivas disponibles para quienes se encuentran en la etapa de crecimiento adecuada.

También contamos con técnicas innovadoras no invasivas como la terapia física que puede incluir ejercicios específicos de escoliosis que ayudan a minimizar la progresión de la curvatura. Nuestros terapeutas también ayudan a educar al paciente sobre el tipo específico de curvatura que tiene.

Fisioterapia, enyesado en serie y un dispositivo ortopédico podrían ser opciones para ayudar a detener la progresión de la curvatura. La fisioterapia ayuda a los niños a tener más fuerza y confianza, y se centra en lo más importante para ellos y en sus actividades cotidianas preferidas.

La terapia puede incluir ejercicios específicos de escoliosis que ayudan a minimizar la progresión de la curvatura. Nuestros terapeutas también ayudan a educar al paciente sobre el tipo específico de curvatura que tiene.

El dispositivo ortopédico también puede ayudar a detener la progresión de una curvatura, pero puede ser más complicado porque usar el aparato ortopédico como se indica es fundamental para el éxito del tratamiento.

Tratamientos quirúrgicos

Según la gravedad de la deformidad y la etapa de crecimiento del niño, se pueden recomendar cirugías innovadoras.

A continuación, se muestran algunos de los tratamientos quirúrgicos que ofrecemos para la afección de la columna vertebral del niño.

La atadura del cuerpo vertebral anterior (AVBT) utiliza una cuerda fuerte y flexible a fin de tirar suavemente de la parte externa de una curva de escoliosis con el objetivo de enderezar la columna vertebral. Se coloca un tornillo en cada vértebra de la curva y, a continuación, se sujeta a la cuerda flexible con la columna en una posición más recta.

Las varillas que acompañan el crecimiento permiten que la columna crezca de manera continua y controlada. Esto se realiza como un procedimiento quirúrgico, donde se anexan las varillas a la columna por encima y por debajo de las curvas, con tornillos. Las varillas extensibles se alargan con anestesia cada cuatro a seis meses, según cómo se vaya modificando la curvatura de la columna.

La costilla de titanio protésica vertical y expansible (VEPTR, o costilla de titanio) es una varilla curva de titanio que se encastra en la parte de atrás del pecho y la columna y está diseñada principalmente para que la usen niños con una malformación en la pared torácica.

Las varillas del sistema de distracción y ortesis de la columna vertebral (MAGEC) con control de expansión magnética podrían recomendarse para niños más pequeños con curvaturas menos severas. Con las varillas del MAGEC, se realiza una sola cirugía al principio, pero el procedimiento para extenderlas no es invasivo y elimina la necesidad de recurrir a varias cirugías.

La intervención quirúrgica de fusión espinal se recomienda para corregir una curvatura o evitar que empeore. La fusión podría recomendarse para un niño si todavía está creciendo y su curvatura es más pronunciada, o si ha dejado de crecer y la columna necesita estabilizarse.